Últimamente, es probable que haya sentido un «ay» distinto al pagar las compras. Los precios están subiendo mientras que el poder adquisitivo está cayendo, no es una buena combinación. Si bien es posible que haya tenido que ajustar su presupuesto para alimentos, no debería hacerlo a expensas de evitar una dieta saludable y deliciosa. Una buena nutrición es esencial para una buena salud. Y su salud debe ser una prioridad. Así que sí, los precios de los alimentos han subido, pero ciertos alimentos básicos siguen siendo una buena ganga (salud y presupuesto) y, lo que es más importante, saben muy bien.
La próxima vez que vaya al supermercado, agregue estos alimentos a su lista de compras.
No solo se convertirá en un comprador de alimentos más inteligente, sino también en un conocedor del buen sabor y los alimentos cargados de nutrientes:
- Plátanos: una de las frutas más baratas para comprar es un racimo de plátanos, la cantidad que necesite. Los plátanos son perfectos para agregar a la avena, cereales fríos, batidos e incluso tostadas. Un plátano tiene 3 gramos de fibra y es una fuente importante de potasio, vitamina B6 y vitamina C.
- Avena: este cereal caliente favorito siempre es una ganga. Coma un tazón de avena para el desayuno, prepare galletas de avena, utilícelas en un bocado energético proteico o agréguelas a muffins, pan rápido o pastel de carne como espesante. La avena también proporciona fibra soluble y antioxidantes, reduce el azúcar en la sangre y promueve la salud de las bacterias intestinales.
- Yogur griego: este rico yogur es una excelente fuente de proteínas y calcio. Tome una taza en el desayuno con fruta fresca (como plátanos o bayas), agréguela como adorno a una papa al horno o utilícela en lugar de crema agria en una receta para un dip de verduras.
- Mantequilla de maní – Mueva sobre la mantequilla de almendras; la mantequilla de maní es una ganga mucho mejor. Ya sea que se use para hacer un sándwich tradicional de mantequilla de maní y mermelada, en un bocado de proteína energética o incluso en un batido, esta mantequilla de nuez favorita contiene muchos nutrientes que mejoran la salud del corazón, como niacina, manganeso, magnesio, vitamina B6 y vitamina E.
- Higos: es posible que esta pequeña fruta comestible que crece en un árbol Fiscus no esté en su lista de compras, pero dele una oportunidad. De tres a cinco higos aportan cinco gramos de fibra y son perfectos para agregar a su ingesta diaria de frutas. Los higos también proporcionan minerales de calcio, magnesio y fósforo para la formación de huesos, lo que ayuda a prevenir la osteoporosis. Sirva los higos con carne y queso, o cómalos solos.
- Sardinas: no se tape la nariz, pero las sardinas contienen 18 gramos de proteína, omega-3, vitamina D que ayuda a la inmunidad, hierro y potasio: ¡un bote lleno de nutrientes! Coma sardinas en galletas saladas, en una ensalada, agréguelas a un plato de pasta, mézclelas con mayonesa, sal y pimienta, o cómalas directamente de la lata.
- Huevos: los huevos son un alimento clásico y una buena fuente de alrededor de 6 a 7 gramos de proteína por huevo. Además de una buena fuente de proteínas, los huevos también ofrecen vitamina D, ácidos grasos omega-3 y colina. Y asegúrese de comer la yema: las yemas están llenas de sabor y son la parte más nutritiva del huevo.
- Arroz integral: este grano integral es imprescindible para cualquiera que ame un alimento que satisfaga la barriga y que combine bien con otros alimentos. El arroz integral ofrece nutrientes importantes como fibra, fósforo, selenio y hierro. Agregue arroz integral a ensaladas, tazones de proteína, arroz pilaf, agregado a sopas cremosas o como arroz con leche.
- Frijoles: una gran oferta de supermercado son los frijoles: ya sean negros, rojos, pintos, garbanzos, cannellini, riñones, lima o Great Northern, todos los frijoles son alimentos nutritivos y asequibles. Los frijoles son una fuente económica de fibra, proteínas, hierro y más. Agregue frijoles a sopas y guisos, ensaladas, pasta, arroz, hamburguesas o albóndigas y guisos.
- frutas o verduras congeladas: Si bien las frutas y verduras frescas pueden ser una ganga cuando están en temporada, cuando están fuera de temporada, los precios suben. Comprar frutas o verduras congeladas durante todo el año es una opción inteligente y rentable para su bolsillo. Los productos congelados se pueden cocinar en minutos, lo que los hace convenientes al evitar la molestia de cortarlos y prepararlos. Esto significa menos tiempo en la cocina. Las verduras congeladas son perfectas para agregar a sopas, guisos o guisos, mientras que las frutas congeladas son ideales para agregar a batidos o ligeramente descongeladas y agregadas al yogur o cereal para el desayuno. Además, las frutas y verduras congeladas suelen ser nutricionalmente superiores a sus contrapartes frescas. Los alimentos congelados se recogen cuando están más maduros. El proceso de congelación bloquea sus nutrientes, preservando sus vitaminas, minerales y fitoquímicos que respaldan su salud.
El Dr. David Samadi es el Director de Oncología Urológica y Salud Masculina en el Hospital St. Francis en Long Island. Es un renombrado y exitoso experto oncólogo urólogo certificado por la junta y cirujano robótico en la ciudad de Nueva York, considerado como uno de los principales cirujanos de próstata en los EE. UU., con una vasta experiencia en el tratamiento del cáncer de próstata y la prostatectomía laparoscópica asistida por robot. El Dr. Samadi es colaborador médico de NewsMax TV y también es autor de The Ultimate Manual, la Guía del Dr. Samadi para la salud y el bienestar de los hombres, disponible en línea tanto en Amazon como en Barnes & Noble . Visite los sitios web del Dr. Samadi en oncología robótica y cáncer de próstata 911.